Los “indignados” piden apoyo para la movilización contra el Pacto del Euro

Publicado en el Diario de Ferrol
Los “indignados” solicitaron ayer públicamente el apoyo de la ciudadanía para la concentracióncacerolada que convocan el próximo domingo a las ocho en la plaza de Armas –rebautizada por ellos como “del 15-M”– contra el denominado Pacto del Euro. Precisamente esta cuestión fue objeto de una conferencia celebrada ayer mismo e impartida por Xesús Díaz.

Los portavoces del movimiento ciudadano explicaron algunas de las contradicciones en las que incurren las políticas englobadas en el citado pacto, empezando por el intento de impulsar la competitividad bajando los precios pero también los salarios. Criticaron en este sentido que se trate de establecer un control absoluto de los sueldos de los trabajadores, “pisando os convenios e descentralizando calquer proceso negociador”, con el resultado de que “a única forma de loitar sexa a título individual, perdendo forza”. El objetivo, añadieron, es “calar aos traballadores mentres se lles baixa o nivel de vida”.

Otro punto al que se refirieron es la reducción del salario de los trabajadores públicos, que tiene como finalidad, a su juicio, que la referencia que estos suponen para los empleados privados sea menor.

Para los “indignados”, el menor poder adquisitivo que traerán consigo estas medidas repercutirá en una disminución de las ventas y ello representará un importante problema sobre todo para los pequeños comercios y las pequeñas y medianas empresas, que representan, señalaron, el 70% de la masa laboral de este país.

Criticaron asimismo que se plantee, dentro de ese objetivo de aumentar la competitividad, mejorar el sistema educativo y las cuestiones relacionadas con la investigación y el desarrollo. “Para iso se necesitan cartos públicos, cando o que se propón é, precisamente, unha reducción do gasto”, indica el colectivo.

El Pacto del Euro, sostienen, achaca el problema del empleo al mal funcionamiento del mercado laboral y recomienda, en este sentido, la reducción de las coberturas sociales, el abaratamiento del trabajo y la flexibilidad en las relaciones laborales. En la práctica, apuntaron los “indignados”, ello supone “deixar que o empresario faga o que lle dea a gana, pero eso non mellora a produtividade, porque o traballador descontento non produce”.

Otro de los contenidos del Pacto del Euro criticado por el movimiento del 15-M fue el intento de encauzar las economías europeas reduciendo el déficit presupuestario por debajo del 3%. Si el Estado no se puede endeudar, dijeron, para hacer frente al gasto social, empezarán los recortes y las privatizaciones.

Denunció también este colectivo que, para no dejar espacio a las políticas de cada país, el Pacto del Euro pretende incluir estas medidas en las leyes marco de los diferentes estados y se preguntó asimismo de dónde saldrán los impuestos para conseguir mantener la deuda de los países por debajo del 3%. “Se non se pode conseguir cartos dos impostos indirectos subiranse os directos e se se baixan os precios para subilos por outro lado con impostos é totalmente contraditorio”, manifestaron los portavoces. Estos criticaron también las “pruebas rigurosas de resistencia” a los bancos, que son, a su juicio, “papel mollado”. “Eles nos trouxeron ata aquí e agora hai que salvalos”, apuntaron, para concluir que el Pacto del Euro supondrá “unha perda da soberanía nas políticas económicas, un paro bestial, a desaparición do estado do benestar, a perda do poder adquisitivo e o bloqueo económico”, motivos por los cuales es precisa la movilización.